Corría el 2000 cuando Ridley Scott se atrevió con uno de los géneros que levantaban más sarpullidos entre el público. Las películas de romanos habían pasado a la historia --al menos en Hollywood--, pero Scott consiguió el éxito con Gladiator . Pocos habrán olvidado la sed de venganza del protagonista de la película, el gladiador Máximo Décimo Meridio (interpretado por Russell Crowe) tras la ejecución de su familia en el año 180 de nuestra era, cuando Roma vivía convulsionada por las guerras y la corrupción.

Ocho años después, el gladiador ha vuelto. Arqueólogos italianos han encontrado a orillas del río Tíber la tumba del general Marcus Nonius Macrinus, en cuya historia se basó el filme. Marcus fue, como en la película, el hombre de confianza del emperador Marco Aurelio. Sus restos descansan en una tumba de mármol que lleva su nombre cincelado, parte de la cual se anegó por el barro y se desplazó al río. Esos fragmentos ya se han recuperado y las columnas y la decoración están casi intactas, según declaró Cristiano Ranieri, jefe del equipo arqueológico, al diario británico The Times.