Las últimas excavaciones en la ciudad romana de Regina, en la localidad pacense de Casas de Reina, ha sacado a la luz uno de los edificios termales más grandes de la Hispania romana, que tuvo una extensión de más de 3.000 metros cuadrados.

El hallazgo se ha producido durante el XII Curso de Arqueología de Regina, celebrado durante este mes de julio, que ha centrado sus trabajos en una zona junto a la calle principal de la ciudad, en la que ha sido localizado este edificio termal de carácter público y «de notables dimensiones». Ocupó una manzana entera y su extensión superó los tres mil metros cuadrados, de modo que «se trata de las mayores termas públicas encontradas en la comunidad autónoma de Extremadura y una de las mas extensas del estado español», según informó ayer el ayuntamiento en una nota.

«Nos sorprende ir exhumando edificios en Regina con esta categoría. Es complicado encontrar paralelos en nuestro país, en este tipo de ciudades. Estamos muy ilusionados», ha manifestado Juan José Chamizo, codirector del Curso de Arqueología. Se han excavado dos piscinas, una de agua caliente y una segunda de mayores dimensiones, la «natatio», que podía ser tanto de agua fría como templada.

ESTUCOS Y MÁRMOL / Además han aflorado dos grandes estancias que en origen tuvieron paredes decoradas con estucos y suelos recubiertos de mármol, el sistema para calefactar las estancias de la zona caliente. Se han conservado también los sótanos donde se calentaba el agua para todo el complejo termal.

Esta edificación, que se ha excavado en una cuarta parte, en su día contó con dos áreas simétricas para separar por sexo a los usuarios de las termas. Según indica el consistorio, las actas del II Concilio Hispalense del año 619 recogían las últimas referencias conocidas sobre la Regina antigua.

La ciudad, en decadencia mucho tiempo antes, acabó abandonada y olvidada bajo la tierra y, desde que en 1978 se iniciaran las excavaciones en el yacimiento, los secretos que se guardaba esa tierra se han ido desvelando «sin demasiada prisa y con demasiadas pausas».

Así, en los últimos años se ha conocido que Regina contó en su zona central con grandes templos para el culto religioso e imperial, casas, amplias calles porticadas, un gran mercado y una muralla que protegía la ciudad, además de su conocido teatro.

La importancia de la ciudad en los primeros siglos de nuestra era queda reflejada en las «destacables» dimensiones de todos los edificios exhumados hasta la fecha.

TURISMO CULTURAL / Para el Ayuntamiento de Casas de Reina, que junto a la Dirección de Museos, Bibliotecas y Patrimonio Cultural de la Junta ha colaborado en este curso, este nuevo descubrimiento es un paso más para buscar mediante el turismo cultural «nuevas fuentes de trabajo y riqueza en un territorio, la Campiña Sur», a su juicio «demasiado dependiente» de una agricultura «en claro proceso regresivo».