A Jessamy, la protagonista de ocho años de La niña Icaro (El Aleph), le gusta leer a Shakespeare. Algo que choca si no se conoce a la autora del libro. A esta misma edad, Helen Oyeyemi (Nigeria, 1984) leía nueve libros por semana. Su pasión por la lectura fue la que la llevó, con apenas 18 años, a enviarle a un agente las 20 primeras páginas del libro que ahora se publica en España y cuyos derechos se han vendido ya en 18 países.

"Sólo quería preguntarle si podría ser escritora algún día, a los 30 años", recuerda la autora, que no acaba de creerse todo lo que le ha ocurrido durante los últimos dos años. Su actual agente, Robin Wade, le contestó al día siguiente para decirle que encontraría un comprador. Este fue Bloomsbury, la prestigiosa editorial que publica los libros de Harry Potter, que pagó la friolera de 400.000 libras esterlinas (más de 600.000 euros) como avance por el libro que salió a la venta el pasado enero en Inglaterra. Al recibir esta respuesta, Oyeyemi se puso manos a la obra y en un par de semanas entregó 130 páginas de su obra.

La niña Icaro cuenta la historia de una chiquilla, de padre inglés y madre nigeriana, incapaz de deshacerse del sentimiento de soledad que la embarga. Durante su primera visita al poblado de la familia de su madre en Nigeria, conocerá a Tilly Tilly, que resultará ser una amiga invisible muy peculiar. Aunque afirma que no se trata de un libro autobiográfico, Oyeyemi se basó en su propia experiencia para crear este personaje.

Las múltiples críticas positivas de los más prestigiosos periódicos anglosajones y las decenas de entrevistas que ha concedido --incluso antes de la publicación de la novela-- no la han cambiado. Por el momento, está estudiando Ciencias Políticas --"necesito hacer algo que no tenga nada que ver con la escritura"-- y ha iniciado su segunda obra.