Cada año por estas fechas, la Academia de Cine de Hollywood invita a un nutrido grupo de profesionales del sector para que formen parte de ella. Actores, directores, escritores, músicos, documentalistas, fotógrafos, decoradores. Todas las disciplinas tienen su representación en el seno de esta gran estructura que anualmente entrega los Oscar.

En el 2013 se invitó a formar parte de la Academia a 276 nuevos miembros. En el 2014, a 271, y en el 2015, a 322. Precisamente esa fue la primera vez que comenzó a hablarse de la necesidad de renovación, de inclusión y de diversidad después de la polémica de los #OscarSoWhite. La inmensa mayoría de las nominaciones en esa edición estaban copadas por hombres de raza caucásica. Las mujeres y las minorías raciales apenas estaban representadas y las asociaciones comenzaron a levantarse frente a las desigualdades.

Así que tanto el CEO Dawn Hudson como la presidenta Cheryl Boone Isaacs comenzaron una labor de maquillaje que consistió en anunciar la inminente entrada de aire fresco a la institución a través de nuevas voces que se encargaran de renovar la arcaica estructura patriarcal sobre la que parecían sustentarse unos premios totalmente alejados de la realidad y las reivindicaciones sociales del momento.

El 2016 fue definitivo en ese sentido. Más de 600 nuevos invitados y un mayor porcentaje de mujeres, afroamericanos y otras nacionalidades para romper con el porcentaje del 90% de blancos y el 75% de hombres que se había perpetuado hasta el momento. Por primera vez se fijó una meta: en el 2020 se tendría que haber alcanzado la paridad entre hombres y mujeres y duplicado el número de miembros de minorías.

Siguiendo esta línea ascendente, en el 2017 se amplió el número a 774. Sin embargo, el porcentaje femenino alcanzaba solo el 39%. El 2018 ha supuesto un avance considerable en el tratamiento y la inclusión de la mujer dentro de la Academia después del caso Weinstein, que impulsaron el #MeToo. Rozando la paridad, con el 49% de mujeres entre los nuevos miembros de un total de 928 invitaciones, y nueve categorías en las que hay más mujeres que hombres (intérpretes, dirección de cásting, diseñadoras de vestuario, documental, ejecutivas, directoras de montaje, maquillaje y peluquería, producción y relaciones públicas).

La diversidad cultural y racial también se ha visto representada a través de 59 países y la nómina de personas de color ha aumentado al 38% entre los invitados. Basta con echar un vistazo a los nombres de la lista para darnos cuenta de la riqueza de la selección. El director surcoreano Hong Sang-soo, el húngaro Béla Tarr o el italiano Luca Guadagnino, todos representantes de un cine internacional de autor que ha comenzado a tener repercusión en los premios.

LATINOS Y ESPAÑOLES / En la lista de este año encontramos muchos latinos (entre ellos, Ricardo Darín, Daniela Vega, Pedro Pascal, Paulina García y Alice Braga) y 14 actores españoles: Carmen Maura, Javier Cámara, Javier Gutiérrez, Verónica Echegui, Emma Suárez, Rossy de Palma, Eduardo Noriega, Rubén Ochandiano, Marta Etura, Bárbara Lennie, Ángela Molina, Carlos Bardem, Natalia de Molina y Jordi Mollà. Además, en otras categorías encontramos los nombres de la montadora Elena Ruiz o la maquilladora Ana Lozano.

¿Qué requisitos hay que cumplir para entrar en este club? Lograr una nominación, lo que implica tener un mínimo de carrera internacional o tres títulos estrenados en el mercado anglosajón para entrar en su radar.

Son numerosos los profesionales de nuestro país que forman parte de la Academia de Hollywood. Caras visibles como Penélope Cruz, Javier Bardem, Almodóvar, J.A. Bayona, Isabel Coixet o Álex de la Iglesia, pero también directores de fotografía como José Luis Alcaine, diseñadores de vestuario como Paco Delgado, compositores como Fernando Velázquez o productoras como Belén Atienza. Una de las primeras fue Assumpta Serna, que fue propuesta para su comité ejecutivo.

Los últimos meses han sido comprometidos para Jon Bailey, director de la Academia, que tuvo que desmentir rumores de acoso y expulsar a Weinstein, Bill Cosby y Roman Polanski. Ahora, la mujer del último, Emmanuelle Seigner, ha sido invitada a unirse al organismo. Un signo que define los nuevos tiempos.