El Premio Internacional RBA de novela negra, el mejor dotado del género, con 120.000 euros, sirve unas veces para que la editorial convocante fiche a primeras espadas de la competencia (Michael Connelly, Patricia Cornwell) y otras para fidelizar e impulsar entre el público a los principales autores de la casa (Philip Kerr, Harlan Coben). Es lo que ha sucedido este año: la editorial barcelonesa otorgó ayer el galardón a Arnaldur Indridason (Reykjavik, 1961), el reconocido novelista islandés autor de la serie de novelas del inspector Erlendur Sveinson. Aunque en esta ocasión el libro premiado, El pasaje de las sombras , no está protagonizado por este policía, nostálgico de los buenos y viejos tiempos de la Islandia rural.

Indridason empezó ayer agradeciendo la atención que recibe como autor que escribe en una lengua, el islandés, con solo 300.000 hablantes y bajo una intensa presión del inglés. "Las lenguas pequeñas deben luchar y no rendirse", dijo. Una obligación que dijo sentir como islandés. "Una manera de mantener vivo el idioma es escribirlo", añadió.

El pasaje de las sombras , que se publicará en octubre, parte precisamente del momento en que Islandia empezó a descubrir las ventajas y problemas de la globalización. En la novela, dos agentes de policía descubren el cadáver de un anciano. La investigación, situada en la actualidad, se entrecruza con otra muerte.