LOS AÑOS DE LA ALEGRÍA

José Giménez Corbatón

Prames

La historia de Jesús de Nazaret, sin entrar en cuestiones religiosas, tiene un atractivo que seduce por sí misma. Por ello no es extraño que haya servido como base a numerosas narraciones que recrean sus pasos. Ahora, el escritor zaragozano José Giménez Corbatón se une a los llamados por Jesús en su más reciente novela, Los años de la alegría, que ha publicado Prames.

Buscando la cara más humana en la figura de Jesús, la novela transcurre en el periodo de predicación de su protagonista --aunque también se mueve al pasado--, pero en ella no se dan los milagros que recogen los Evangelios; es más, Jesús se siente molesto cuando alguien comenta alguno de los prodigios que se le achacan. Para alejarse un poco más de lo que sería el texto sagrado y dar un punto más de realismo, los nombres de los personajes se mantienen más cerca de su original que del más conocido bíblico. Así, Jesús es Yeixu, su madre María es Myriam, Yosef su padre José, Pedro es Cefas, María Magdalena es sencillamente Magdala...

La estructura que sustenta la novela es una urdimbre compleja pero llena de elegancia en la forma y en el fondo, y destaca el excelente tratamiento que tienen los personajes femeninos, más motivado por el buen hacer del autor y la influencia igualitaria de Jesús que por una supuesta voluntad de cubrir cupos coyunturales.

Corbatón ahonda en esa faceta humana de Yeixu, de su familia --hermanos de sangre incluidos-- y de quienes le rodean, aunque no por ello elimina la discusión religiosa. Pero en la narración importa mucho más la relación entre los personajes, que a través de capítulos cortos van tejiendo una tupida trama de referencias vitales e históricas, de inquietudes pasadas y presentes, así como sus ilusiones, anhelos y temores, que son precisamente lo que los hace de una humanidad tangible, empezando por Yeixu.