El cantante Julio Iglesias deleitó hoy a unas 5.000 personas en la principal plaza pública de Playa del Carmen, a orilla del mar Caribe mexicano, donde fue declarado huésped distinguido.

El recital que ofreció en la Plaza 28 de Julio de Playa del Carmen, en el estado caribeño de Quintana Roo, duró poco más de una hora y media en la que deleitó a los asistentes, quienes entraron de manera gratuita al espectáculo.

Con traje y corbata negros y camisa blanca, Julio Iglesias abrió su concierto con un popurrí de sus mayores éxitos, que fueron coreados por sus admiradores y admiradoras.

De muy buen humor y envuelto en un clima fresco, el cantante español tuvo un constante intercambio con el público, a quien confesó algunas intimidades.

"Antes era una obsesión hacer el amor antes de cantar, ahora si hago el amor ya no canto", dijo el afamado artista. "Es un privilegio estar en tierras del Caribe, siempre venía enamorado", aseguró.

Durante el concierto, el gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, entregó al interprete un reconocimiento como huésped distinguido de este estado.

Fuentes cercanas a los organizadores señalaron a Efe que Julio Iglesias quiso agradecer de "la mejor forma que sabe" el trato que ha recibido en México a lo largo de su carrera y que eligió esta zona por la belleza de sus playas.