En una decisión poco habitual en los premios literarios, el jurado decidió declarar ayer desierto el premio Cáceres de novela corta. José Luis Bernal, Alonso Guerrero y Jesús Cañas, componentes del jurado, debatieron sobre las nueve obras del certamen y concluyeron que ninguna de ellas tenía la calidad suficiente para hacerse acreedora de este galardón, uno de los de mayor raigambre en el panorama extremeño.

En los otros dos premios convocados por la Diputación de Cáceres sí hubo ganadores: el de periodismo Dionisio Acedo recayó en Antonio José Armero, del diario Hoy, por un trabajo sobre la trashumancia (El viaje de Longinos, el último trashumante ).

El jurado otorgó un accésit a la periodista Lola Luceño, de EL PERIODICO EXTREMADURA, que había presentado un reportaje sobre la minería en Cáceres (El poblado minero: galería de recuerdos ). También se falló el premio Flor de Jara de poesía, que obtuvo Miguel Sánchez Robles, murciano de 1957 y profesor de instituto, por el poemario Arder, haber ardido .

Los galardones se dieron a conocer anoche en un acto público en el complejo cultural San Francisco, de Cáceres.