La continuidad de la dinastía real más antigua del mundo está en juego. La princesa Kiko (foto)ha ingresado hoy en un hospital de Tokio entre algodones. Se preveía que la princesa, embarazada de un niño, diera a luz a finales de septiembre, pero varias complicaciones han hecho adelantar la fecha. Por eso, el futuro hijo de la princesa Kiko, que será el tercero en la línea de sucesión al trono japonés, después de su padre y del príncipe Naruhito, nacerá por cesárea alrededor del próximo 6 de septiembre.