El programa infantil Los Lunnis da su salto a la gran pantalla. Y lo hace por todo lo alto, con una impresionante producción que combina por primera vez en España personajes reales, animación y marionetas. La gran aventura de los Lunnis y el libro mágico abre una nueva vía dentro del cine familiar en España gracias a su ambición a la hora de ofrecer una película de envergadura que se aleja del esquema del formato televisivo y ofrece una apasionante aventura a medio camino entre Barrio Sésamo y Alicia en el país de las maravillas.

«Hay que estar a la altura de los productos que se hacen en Hollywood. Su estándar es grandilocuente, y no se puede ofrecer menos al espectador», cuenta Juan Pablo Buscarini, director de la película. «Si vas a jugar en esa liga, tienes que hacer algo a la altura de las circunstancias». Lo dice alguien que ha conocido el éxito en este terreno gracias a películas como Tini: El gran cambio de Violetta (2016) o Pérez, el ratoncito de tus sueños (2006), por la que ganó el Goya a la mejor película de animación.

En ella ya combinaba diferentes técnicas, pero en esta ocasión, el reto era todavía mucho mayor. «Los Lunnis tenían que dar una pirueta visual, y por eso utilizamos la mejor tecnología, el equipo que utilizó James Cameron en Avatar. Gracias a eso pudimos mover la cámara dentro de sets virtuales para que el espectador se introdujera en la acción y acompañara a los personajes en su viaje como si se tratara de una experiencia inmersiva».

Buscarini reconoce que esta película le ha dado la posibilidad de volar como cineasta. La gran aventura de Los Lunnis y el libro mágico cuenta la historia de Mar (la pequeña Carla Chiorazzo), una niña de 8 años experta en leyendas gracias a los libros que su abuelo (Ramón Barea) le lee cada noche. Hasta que un día, el malvado Crudo (interpretado por Bruno Oro), que odia la fantasía, pretenda acabar con ella para que nadie pueda escapar de la realidad a través de la imaginación. A lo largo del camino iremos visitando buena parte de los cuentos más célebres dentro de la cultura popular, entre ellos Pinocho, Alicia, el Mago de Oz, el Flautista de Hamelín y, por supuesto, el Ratoncito Pérez.

«El reto consistía en que cada uno de esos cuentos tuviera una identidad visual y que cada mundo estuviera perfectamente definido. Por eso contamos con el mejor equipo de efectos visuales y de arte, con Pilar Revuelta a la cabeza (ganadora de un Oscar por El laberinto del fauno) y gracias al talento de todos los departamentos pudimos hacer una película con un presupuesto razonable y que luciera muy apoteósica».

Por supuesto, Los Lunnis (Lublú, Lulila, Lupita y Lucha) forman parte fundamental de la película, al igual que Lucrecia, que interpreta a la guardiana del Libro mágico. Pero también encontramos a actores como Pablo Carbonell, que encarna al mago Merlín.