Phil Collins ha anunciado que no volverá a los escenarios debido a sus problemas de salud. "Ya no pertenezco a ese mundo y no creo que nadie vaya a echarme de menos. Estoy mucho más feliz apartándome completamente". Prefiere hacerlo ahora, a sus 60 años, antes de que su estado físico empeore. Son varios los frentes abiertos. Por un lado, están los problemas de oído descubiertos hace tiempo; por otro, el dolor en las cervicales que se agudizaron tras la última gira con Genesis (2007) y que están relacionados con complicaciones nerviosas que le impiden tocar el piano y la batería. A su cuerpo le han pasado factura sus más de 30 años en activo, en los que ha triunfado tanto con el grupo Genesis como en solitario. Ha vendido 150 millones de álbumes, ha ganado 7 Grammys y un Oscar por la canción original de la película Tarzán. Él músico afronta la retirada sin excesivo drama. "No me preocupa volver a tocar la batería sino no ser capaz de cortar una rebanada de pan o de construir algo con mis hijos", ha declarado en una entrevista que publica la revista FHM. Desde que en el 2008 se separó de su tercera mujer, Orianne Cevey, 22 años más joven que él, Collins vive solo en Suiza, cerca de la mansión donde su ex reside con los hijos de ambos, Nicholas y Matthew, de 11 y 7 años, respectivamente. El artista tiene además otros dos hijos ya mayores de su primer matrimonio, Simon y Lily. >> Más información en e-Periódico