El escritor Juan Goytisolo reconoció ayer que las nuevas tecnologías no van con él. Escribe siempre a mano, no utiliza máquina de escribir ni ordenador, y el "único adelanto" que ha asimilado es "el bolígrafo", que decidió adoptar porque la pluma estilográfica le manchaba los dedos.

"Vivo al margen de todo. Me he quedado colgado del siglo XIX", contó Goytisolo, Premio Extremadura a la Creación en el 2005 por su trayectoria literaria.

El escritor participó en un coloquio tras la lección magistral que pronunció en la segunda jornada del ciclo Lecciones y maestros , organizado por la Fundación Santillana y la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en la localidad cántabra de Santillana del Mar.

TECNOLOGIAS Aparentemente serio, y un poco seco a veces para quienes no lo conocen bien, Goytisolo hizo reír a los asistentes al ciclo en varias ocasiones, como cuando habló de su "torpeza" para las nuevas tecnologías y dijo que, en lo que a ellas se refiere, es "un neandertalito".

Pero también habló de su concepción de la literatura y de cómo "nunca" hizo caso a las recomendaciones que le hicieron algunos editores de que no escribiera una literatura "tan difícil".

Parafraseando a Genet, Goytisolo dijo que "la dificultad es la cortesía del autor con el lector", y se mostró partidario de confiar en que "la raza de lectores seguirá amando la dificultad del texto literario".

"Nunca he buscado tener un mayor número de lectores, sino de relectores posibles. Esa ha sido mi ambición literaria", subrayó el autor de Juan sin Tierra .

En su lección magistral, Goytisolo hizo una defensa del saber "no rentable", que con frecuencia "conduce al aislamiento y a la marginación", y aseguró que la transición política que "cambió el rumbo" de la sociedad española "no ha sido acompañada de una transición cultural".

Goytisolo reflexionó sobre el saber desinteresado, que no tiene como objetivo hacer carrera o subir peldaños en el escalafón.

El ciclo en el que ha participado Goytisolo reúne a tres voces esenciales de la literatura iberoamericana: al mexicano Carlos Fuentes, al que se le dedicó la jornada del lunes; al autor de Señas de identidad , y al portugués José Saramago, que cierra hoy el encuentro. Si ayer Fuentes dio las claves de su proceso creador, Goytisolo facilitó ayer su idea de la cultura y reflexionó sobre las diferencias existente entre este término y el de educación, o, mejor dicho, "instrucción".

Fue una Apología del saber no rentable --tituló de su intervención-- la que hizo Goytisolo, aunque sabe que "el saber desinteresado es empresa quijotesca" y puede acabar con "el castigo" de quien lo persigue.