Miles de personas despidieron ayer al cantaor Juanito Valderrama, fallecido en Sevilla, en la capilla ardiente instalada en la antigua iglesia de San Luis de Los Franceses, donde la afluencia de ciudadanos ha sido constante y ha obligado a cerrarla una hora antes de lo previsto.

Entre los cientos de personas que desde primera hora de la mañana se agolpaban a las puertas de la iglesia para rendir un último homenaje al cantaor había políticos, como el presidente de la Junta, Manuel Chaves, o el delegado del Gobierno, Juan Ignacio Zoido; artistas, como los cantaores Calixto Sánchez o Juan Peña El Lebrijano , y periodistas, como Antonio Burgos, su biógrafo. Su localidad natal, Torredelcampo y Espartinas, donde el cantaor residía, han decretado tres días de luto.