Hasta 900 personas del mundo de la nobleza y el espectáculo se reunieron el viernes por la noche en el Club Deportivo de Montecarlo. El motivo, la 58º gala de la Cruz Roja, que anualmente recauda fondos en la capital monegasca. El precio del cubierto: mil euros.
Fueron muchas las caras conocidas que asistieron al evento, pero solo una captó la atención. Con un largo vestido verde, la nadadora Charlene Wittstock, de 28 años, entró después de Alberto II y se sentó en la mesa de la familia real monegasca. Con esta aparición, los rumores que la relacionan con el príncipe se van confirmando. Estefanía y Carolina acudieron también a la gala junto a la princesa Antonieta, hermana de Rainiero. Y tras ellos, un elenco de actrices, empresarios, cantantes, diseñadores y personajes de la moda, como la exmodelo Ivana Trump y su jovencísimo novio.
