La actriz Encarna Paso, protagonista de, entre otras, la primera película en español que consiguió un Oscar -Volver a empezar, de José Luis Garci, en 1983-, falleció ayer en Madrid a los 88 años. Nieta del dramaturgo Antonio Paso y sobrina de los autores Alfonso y Manuel Paso, el gran público la conoció por sus trabajos en cine y televisión, pero también tuvo una dilatada carrera en el mundo del teatro.

Nacida el 25 de marzo de 1931 en Madrid, trabajó por primera vez con solo 14 años en la película Botón de Ancla, de Ramón Torrado, aunque fue el teatro el que le brindó su debut profesional, en concreto, la compañía de Milagros Leal y Salvador Soler Mari. Después pasó a la de Catalina Barcena, con la que interpretó obras de Bernard Shaw, Martínez Sierra, Julio Alejandro y Carlos Arniches. Paso llevó a cabo numerosas giras por España con diversas compañías y junto a Ismael Merlo representó gran parte del repertorio cómico español.

En cine trabajó con directores reconocidos en películas que dejaron huella, como La prima Angélica, de Carlos Saura (1973), o la adaptación que en 1976 hizo Antonio Giménez Rico de Mi idolatrado hijo Sisí, de Miguel Delibes. Pero fue Garci quien dio el mayor impulso a su carrera al otorgarle el papel de Elena en Volver a empezar, que Paso protagonizó con el desaparecido Antonio Ferrandis. La historia del escritor Antonio Miguel Albajara, un exiliado español que regresa a Gijón tras recibir el Nobel de Literatura y allí se reencuentra con su novia de juventud, se convirtió en un homenaje a la «generación interrumpida» de la guerra civil, en palabras del director. En teatro, fue la malévola Livia de Yo, Claudio, en el festival de Mérida, en 2004, junto a Héctor Alterio.