Su nombre real no resultaba tan glamuroso, ya que se llamaba Ernestine Jane Geraldine Russell, pero el multimillonario, productor de cine y empresario aéreo que la descubrió para la gran pantalla, Howard Hughes, eliminó dos de sus nombres de pila y la lanzó al mundo como Jane Russell. Fue en un extraño wéstern erótico dirigido por el propio Hughes en 1943, The outlaw . El pasado lunes falleció a los 89 años de un fallo respiratorio. Apartada del cine desde finales de los 60, colaboraba activamente en causas benéficas. Nacida en 1921, curso estudios de arte dramático y trabajó como modelo fotográfico hasta que fue descubierta por Hughes. No fue una actriz de un talento rutilante, pero sí tuvo en pantalla una presencia magnética. Su físico, y su forma realmente provocadora de mirar a cámara, la convirtieron en uno de los mitos eróticos más contundentes de los años 40 y 50. Su mejor película fue Los caballeros las prefieren rubias , un musical rodado por Howard Hawks en 1953 en el que compartió cartel con Marlyn Monroe.
