Los recientes hallazgos de restos romanos en la desembocadura del Ebro y en el sur de España (por ejemplo en la localidad pacense de Casas de Reina) han permitido documentar la "primera presencia romana" en Hispania y la lucha entre romanos y cartagineses, además de comprobar lo "avanzado que estaba ya el proceso de romanización en el siglo I antes de Cristo".

Así lo indicó en León el profesor de Arqueología de la Universidad de León Angel Morillo, director del XX Congreso Internacional de Estudios sobre la Frontera Romana, que reúne cada tres años a los especialistas en arqueología romana del centro y el norte de Europa, el Oriente Próximo y el Norte de Africa y que se celebra en León.

Más de 300 investigadores participarán hasta el de septiembre en este congreso, en el que hasta ahora se han puesto de manifiesto novedades importantes fruto de los hallazgos en los últimos meses en distintos puntos de España.

Morillo se refirió a los hallazgos en la antigua desembocadura del Ebro, donde se han descubierto dos campamentos de la Segunda Guerra Púnica que han permitido documentar la primera presencia de Roma en la Península Ibérica así como su lucha contra cartago.

En segundo término, se refirió a los nuevos campamentos republicanos hallados en el sur del país, en Casas de Reina (Badajoz), en la Puebla de Don Fabrique (Granada) y en el cerro de las Fuentes de Archivel (Murcia).

Explicó que estos hallazgos ilustran que "Hispania participó muy activamente en las guerras civiles del siglo I antes de Cristo, que llevaron al final de la República".

Esto significa que "ya en el siglo I a. C. Hispania estaba integrada perfectamente en el estado Romano y nos permite calibrar hasta qué punto el proceso de romanización de estas zonas ya estaba avanzado y no había problemas internos con los indígenas".