El Museo de Cáceres acoge desde hoy y hasta el 24 de noviembre la exposición Ouka Leele. Inédita, que muestra 64 obras de la artista, que reconoce que estas obras son "las más sinceras, espontáneas y libres".

Manifiesta que a ella siempre se la ha reconocido por la fotografía pintada a mano con acuarela, pero que en esta exposición todas las expuestas son en blanco y negro o color.

Según explica esta fotógrafa, Premio Nacional en 2005, se encontró con muchos negativos en su archivo que no se habían expuesto, porque en algunos casos eran fotografías para ella y que no tenía intención de mostrar.

Sin embargo, ahora si se encuentra en condiciones de enseñar esas fotografías que van desde 1975 hasta la actualidad y que, ha asegurado, se trata de su trabajo "más intimo, espontáneo, sincero y sin ningún tipo de máscara".

Recuerda que sus inicios fueron en la pintura y más tarde se encontró con la fotografía, pero ahora mezcla todo tipo de estilos y disciplinas, como vídeo, dibujo o performance, porque "al contrario de cuando era joven, que buscaba un estilo reconocible, ahora lucho más por la libertad de creación".

Por su parte, el comisario de la muestra, Rafael Gordon, manifiesta que las fotografías de Ouka Leele son "iconos de su tiempo que invocan la sensibilidad estética de la persona".

Para el responsable de la exposición, Bárbara Allende y Gil de Biedma, nombre real de la artista, asocia el arte a la reflexión y realiza "un arte de ideas para alcanzar la plenitud del significado de hacer arte".

Ouka Leele. Inédita podrá verse en el Museo de Cáceres, del 24 de octubre al 24 de noviembre de martes a sábado y, posteriormente, la muestra se trasladará a Badajoz, donde permanecerá expuesta en la Sala Europa del 28 de noviembre hasta el 12 de enero de 2014.

En lo próximo que está trabajando esta artista universal es en una exposición que llegará en febrero de 2014 al Círculo de Bellas Artes de Madrid, en la que contará el conflicto que se vive en el Congo a causa del coltan, un mineral que se utiliza en los teléfonos móviles y ordenadores.

"Es algo que está en el día a día de todos y quiero que se sepa que detrás de ello hay muerte y violencia", concluye la artista quien ha añadido que el arte debe servir también para hacer "una llamada de atención".