Nora Navas apareció ayer en los ensayos de la serie Una carta para Evita con una botella de cava bajo el brazo. La actriz brindó con y por Agustí Villaronga, que ha pasado de ser el bicho raro del cine español a un director al que le piden autógrafos en el metro. Todo se debe a Pa negre , que ayer culminó su año de gloria al ser elegida por la Academia de Cine como candidata para representar a España en Hollywood. Allí luchará por colarse entre las que optan al Oscar al mejor filme de habla no inglesa.
El retrato emocional de la posguerra en Catalunya venció a sus dos rivales: La voz dormida , melodrama sobre la represión franquista en las cárceles realizado por Benito Zambrano y basado en la novela del mismo nombre de la escritora extremeña Dulce Chacón; y La piel que habito , de Pedro Almodóvar, el más internacional de nuestros directores y el que, a priori, tenía más papeletas para vencer. Finalmente, entre las tres precandidatas, la Academia optó por Pa negre , que si bien en febrero hizo historia al convertirse en la primera cinta en catalán galardonada con el máximo premio del cine español, el Goya, ahora podría ser la primera en conquistar la estatuilla de Hollywood.
Que nadie cante victoria todavía porque queda un largo camino. La Academia de EEUU es ahora la que tiene que decidir si Pa negre es mejor que las candidatas presentadas por los otros países y hasta enero no se hará pública la lista definitiva de los filmes. Isona Passola, entusiasta productora de la cinta catalana, prometió ayer en Madrid dejarse la piel en la promoción. "Agustí Villaronga --añadió Passola-- es muy tímido pero también estará a por todas".
UN SUEÑO
Si el alud de nominaciones al Goya pilló a Villaronga comprando alcachofas en Barcelona, la elección de Pa negre por parte de la Academia le pilló también en Barcelona, en mitad de una reunión para revisar el guión de Una carta para Evita (TVE). Una representante le mandó un mensaje de texto a su móvil que decía: "Doblete". Efectivamente, y ante un notario, los actores José Coronado y Verónica Echegui acababan de leer en la sede madrileña de la Academia de Cine el nombre de la película vencedora, que también representará a España en los premios Ariel de México.
"Aspirar al Oscar es un sueño para cualquier cineasta", aseguró un nervioso y sorprendido Villaronga, que no se alegró tanto por él mismo sino por todas las personas que han apoyado a Pa negre . Aunque repitió hasta la saciedad que no pensaba mucho en ello, no tuvo más remedio que confesarse mitómano perdido, así que la idea de pisar la alfombra roja del Teatro Kodak le vuelve loco de ilusión.
