"Ha sido un susto grande, pero ya se ha terminado". Una sonriente Isabel Pantoja abandonó ayer la Clínica Infanta Luisa de Sevilla, donde ha estado ingresada desde el pasado viernes a causa de una importante subida de azúcar y triglicéridos provocada por el estrés. La cantante, acompañada por su compañero sentimental, el exalcalde de Marbella Julián Muñoz, dijo que se encuentra bien y que deberá seguir al menos unos días en tratamiento hasta recuperar los niveles metabólicos. La tonadillera acudió a la clínica para hacerse un estudio preanestésico para operarse un nódulo en la garganta. Los análisis dieron como resultado niveles altos de azúcar y triglicéridos, por lo que los médicos la ingresaron.