La batalla legal que mantienen Paulina Rubio y el fisco mexicano ha hecho que la chica dorada decida posponer su boda con Colate, (ambos en la foto, el pasado noviembre) programada para marzo en Cancún. Fuentes de la organización del enlace informaron ayer que la artista "quiere salir primero de un problema legal", ya que debe pagar 412.000 euros por diferentes deudas que mantiene con hacienda.