La policía de Roma recuperó, ayer, La pequeña guitarra , de Pablo Picasso. La pieza, un juguete que el malagueño realizó para su hija Paloma, estaba escondida en una caja de zapatos en casa de un comerciante italiano que, hace dos años, se apropió del objeto de forma fraudulenta.
Picasso donó el juguete a Giuseppe Vittorio Parisi, artista y amigo del genio, y este se lo entregó al comerciante que le aseguró que quería construir una urna adecuada a su valor. Tras la muerte de Parisi, el pasado enero, su viuda denunció el caso. Los investigadores han necesitado un año para localizar la obra que, ahora, será custodiada en el Museo Cívico de Maccagno, dedicado a Parisi.
