Charlotte Rampling ha vivido dos vidas cinematográficas, la primera al lado de mitos como Visconti, Lumet o Woody Allen; y otra, ahora, junto a jóvenes directores. A sus 60 años, recuerda con nostalgia aquel viejo cine de entonces "más libre y comprometido... Hay que resistir para poder volver a él", afirma.

"El cine refleja la vida y la sociedad en que vivimos. Las historias van cambiando, asumiendo distintos contenidos y con diferentes grados de libertad, dependiendo de la época. Aquel cine de entonces era mucho más libre, asumía un grado de compromiso mayor y sus películas, vistas hoy, parecen ultramodernas", explica esta actriz británica que se ha movido con soltura ente Estados Unidos y Europa.

"Hay que seguir resistiendo frente a las ideas y la moral que hoy nos quieren imponer, y regresar a aquel tipo de cine", añade Rampling ante un grupo de periodistas en París. La actriz estrena el viernes Hacia el sur , del francés Laurent Cantet, tras haber rodado junto a Julio Medem Caótica Ana , compartiendo actuación junto a la cantante extremeña Bebe.

Hacia el Sur aborda el turismo sexual practicado por mujeres maduras.