Tierra de Barros es una de las comarcas más fértiles de Extremadura, atravesada por la autovía A-66, constituye una auténtica transición geográfica entre las Vegas del Guadiana y las serranías del sur de la región extremeña. Ya que durante los próximos fines de semana se celebra en La Batalla de La Albuera, proponemos al viajero que aproveche para pasarlo bien y para conocer más esta zona.

El recorrido

El inicio de nuestra ruta es Almendralejo, el centro más importante de la comarca Tierra de Barros y población medieval que surge fruto del desarrollo que realiza la Orden de Santiago en esta zona desde el siglo XIII, constituyéndose en encomienda a mediados del siglo XIV.

Almendralejo es la patria de José de Espronceda y Carolina Coronado. Este centro vinícola extremeño cuenta con importantes bodegas y una elogiable estación enológica. Su plaza de toros es de las más bellas de la Península. La iglesia parroquial de la Purificación es del siglo XVI, con torre de estilo barroco y algunas de las portadas góticas renacentistas.

Igualmente son dignas de mención la iglesia de San Roque y la de San José. De sus conventos destacan el de las Clarisas de Nuestra Señora del Amparo del siglo XVI y el de San Antonio de la Orden Franciscana y del siglo XVII, declarado Monumento de Interés Histórico-Artístico. La ermita de Nuestra Señora de la Piedad está realizada a principios del siglo XVI.

De las casas solariegas y palacios existentes destaca el del Marqués de Monsalud realizado en el siglo XVIII, actualmente sede del ayuntamiento. De gran atractivo es el edificio de la Sociedad del Obrero Extremeño o el Casino del Círculo Mercantil Agrícola decorado con pinturas de Adelardo Covarsí.

Famosa en toda la región es la Fiesta de Las Candelas, que se celebra la noche del 1 al 2 de febrero y que está declarada Fiesta de Interés Turístico Regional.

A escasamente unos diez kilómetros, nos acercamos a Aceuchal, que en tiempos de la Reconquista pasará como fortificación a la Orden del Temple y en siglo XIV será de la Orden de Santiago, llegando a ser cabeza de encomienda.

Como monumentos de interés destacamos la ermita de San Andrés, construcción de estilo mudéjar; el antiguo pósito, obra del siglo XVIII; la casa de la encomienda; la iglesia parroquial de San Pedro, obra originaria del siglo XV y el ayuntamiento. Esta población de Aceuchal es famosa por su excelente producción de ajos.

Solana de los Barros, situada en la orilla izquierda del río Guadajira, después de la Reconquista pasaría a formar parte de la Orden del Temple y, a mediados del siglo XV, se integraría en el Señorío de Feria. Su Iglesia Parroquialdel siglo XVI está dedicada a Santa María Magdalena.

Situada en los caminos que llevaban de Solana a Barcarrota y de Badajoz a Villalba se encuentra Corte de Peleas, que durante mucho tiempo se le conoció con el nombre de Cortecilla. Hubo un antiguo templo del siglo XIV dedicado a Santa María Egipciaca posteriormente derribado y sustituido en la actualidad por un moderno edificio religioso con fachadas encaladas.

Entrín Bajo se encuentra cercano al arroyo Entrín, destacando dentro de su caserío la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Amparo, que fue levantada a principios del siglo XX y debe su fundación a las tropas leonesas que se asentaron por esta comarca después de la Reconquista.

Entrín Alto, al igual que la anterior localidad, fue fundada tras las reconquista de estos territorios y en su interior destaca la iglesia parroquial de Santa Rita, cubierta de bóveda de arista. Cerca de la misma se hay una casa museo que guarda algunas piezas de cierto interés del vecino yacimiento de la Pijotilla. Entre Entrín Alto y Entrín Bajo aún se localizan algunos puentes medievales y cercanos a este último se encuentran los caseríos de Cortegana y Retamal.

La Albuera está cruzada por la N-432 y es conocida por haberse desarrollado en sus cercanías en 1811, la Batalla de La Albuera durante la Guerra de la Independencia, pudiéndose visitar un interesante museo acerca de este hecho histórico.

Cercana se encuentra Almendral, situada entre los límites de la Sierra Sur, y que dispone en su interior de dos iglesias situadas en la misma plaza: la de San Pedro y la de La Magdalena, del siglo XV en estilo gótico. Magnífica es su ermita De Finibus Terrae, de estilo mudéjar y con detalles de arte visigodo en su portada.

Torre de Miguel Sesmero dispone en el interior de su población de la iglesia parroquial de Nuestra Señora. de la Candelaria del siglo XVI y del Convento de las Claras o Molino, del siglo XVIII. Y ya en los límites con la Sierra Sur visitamos Nogales, vigía estratégica del Señorío de Feria desde finales del siglo XIV y establecida junto al imponente castillo, importante enclave militar medieval de Extremadura donde destaca una soberbia torre del homenaje de 35 metros de altura y junto a él, la iglesia de San Cristóbal, edificada en el siglo XV con fachada gótica.

Santa Marta de los Barros es una típica localidad de Tierra de Barros, rodeada de olivos y vides que le dan fama de buenas producciones en aceites y vinos, como lo demuestran las numerosas bodegas existentes. En su interior destaca la iglesia parroquial de Santa Marta del siglo XVI, realizada sobre una ermita anterior, con una interesante portada realizada con granito y de estilo gótico.

Villalba de los Barros fue residencia durante mucho tiempo de los señores de Feria, que vivieron en su castillo hasta mediados del siglo XV, momento éste en que deciden trasladarse al Alcázar de Zafra. Tiene gran fama Villalba de los Barros por su producción vinícola de reconocido renombre. Hasta aquí llegamos esta semana. Continuaremos la próxima con la Ruta por la Tierra de Barros.