El séptimo Goya le llega al extremeño Reyes Abades (Castilblanco, 1949) en plena lucha por el reconocimiento de su profesión de especialista en efectos especiales. Así lo insinuó en el discurso de agradecimiento por el galardón obtenido por El Lobo y pidió ayuda al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que acudió el pasado domingo a la ceremonia de entrega de los premios del cine español. Posteriormente, explicó Abades a este diario, Zapatero habló con él y tomó nota de su petición.

"Los de efectos especiales somos como Teruel: no existimos", afirma Abades, que busca el reconocimiento de su profesión, que él desarrolla desde hace casi 40 años, a través de una normativa propia que englobe a la quincena de empresas que trabajan en España en este sector. "Hasta ahora somos unos alegales permitidos y no queremos seguir siéndolos. Nuestra profesión tiene que ser reconocida institucionalmente", dice.

El extremeño fue casi uno de los pocos profesionales que se llevaron su Goya por otra película que no fuera Mar adentro , que arrasó el pasado domingo al obtener 14 estatuillas, el máximo nunca conseguido por un filme en una edición de los Goya.

FELICITACION "El día que dejen de darme premios como éste voy a empezar a sufrir porque a lo mejor tendré que pensar que estoy acabado", declara a EL PERIODICO EXTREMADURA el responsable de los efectos de películas como Ay Carmela , Días contados o El día de la bestia , todas ellas premiadas en esta categoría.

Abades, que ayer recibió la felicitación pública de la Junta de Extremadura, defiende el trabajo en equipo. "Si no hay, la película no funciona. Uno tiene que rodearse de la mejor gente".

Así, cada trabajo que afronta intenta superar sus propios retos y los que marca el director. "Te recuerdan cosas anteriores que has hecho y te piden que vayas más allá. Por eso, uno no se aburre, porque no te repites; siempre vas al límite". Es lo que ha ocurrido con el trabajo premiado. El principio del rodaje El Lobo coincidió con un mal momento en las relaciones entre Abades y el presidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, a raíz de la participación de Abades en El 7º día , de Carlos Saura, basada en los crímenes de Puerto Hurraco. La película despertó el enfado del gobierno autónomo y provocó duras declaraciones de algunos de sus responsables. "Quizá Ibarra no entendió mi postura", dice.

De El Lobo (la historia de un topo infiltrado en ETA) dice que "ha sido un reto recrear esas situaciones que se plantean en la película: los atentados, la lucha contra el terrorismo, y que nos ha permitido hacer un trabajo vistoso, espectacular".

TREMENDO PRESTIGIO Se lamenta Abades de que haya periodistas que aludan a los premios técnicos como pequeños frente a los grandes de otras categorías. "A mí, recibir un Goya me emociona tanto como a Bardem, me da un prestigio tremendo".

En el año 2000 recibió la Medalla de Extremadura, un hecho que recordó también en la ceremonia de los Goyas, cuando aludió, antes de su petición a Zapatero, a la que le había hecho al presidente extremeño, y que esta se había cumplido: la construcción de un monumento al emigrante en Castilblanco.

Abades, que ha participado en más de 370 películas, ha sido candidato al Goya en 25 ocasiones. El trabajo no cesa. Ya prepara El capitán Alatriste y Tirante el blanco .