El espectáculo "Blanco y Negro" devuelve a Ricky Martin a España, tras su paso por Latinoamérica y Estados Unidos, para ofrecer diez conciertos a partir del 27 de junio en una gira en la que, por primera vez, sube al escenario "sin la necesidad de probar nada a nadie", ha asegurado hoy el cantante a los medios.

"Es esa espontaneidad añadida la que hace de este nuevo tour, si no el más importante de mi carrera sí el más divertido", en un espectáculo "muy de éxitos", avanza Ricky Martin, quien espera "crear por unas horas un mundo perfecto en el que nadie sea juzgado y así retar al público a que se deje llevar por la música".

Burgos recibirá al intérprete de "María" y "Livin' la vida loca" el próximo 27 de junio mientras que Antequera (Málaga) lo hará dos días más tarde.

Almendralejo (Badajoz) -1 de julio-, Barcelona -3 de julio-, Madrid -día 7-, Granada -8 de julio-, Alicante -día 10-, Alzira (Valencia) -día 11-, Zaragoza -13 de julio- y San Sebastián -14 de julio- completan el recorrido español de Martin.

Once músicos, ocho bailarines, un gran escenario y casi 20 canciones conforman este espectáculo, que tendrá "algo de teatral", por el pasado del cantante en los escenarios de Broadway.

En esta ocasión, Ricky Martin, quien se confiesa en estos momentos un enamorado de la bossa nova, ampliará su habitual recorrido por otras músicas, adentrándose "de forma natural y sin exageraciones" en el rock británico y la esencia electrónica del sonido rave.

Coincidiendo con la gira "Blanco y Negro", llega a las tiendas españolas una edición especial de "Ricky Martin: MTV Unplugged" (Sony), el último álbum del puertorriqueño que salió al mercado en noviembre pasado y que contiene nuevas versiones de algunos temas de su carrera grabados en un CD-DVD.

Pero estos conciertos nada tienen que ver con su álbum acústico, donde tuvo la oportunidad de presentar canciones "que no fueran necesariamente los grandes éxitos", sino un listado de emociones "tal y como surgían, rodeado de amigos y sentado en el escenario, algo muy poco común", bromea el cantante.

Uno de esos amigos es Lamari, la voz de Chambao, el grupo que ha acompañado a Martin en su gira por América, con la que "siempre surge algo especial en el escenario".

Ella es un claro ejemplo de lo beneficioso que es para él la colaboración con otros artistas, hasta ahora nombres como Sting, Madonna, Elton John y Miguel Bosé, junto al que canta "Bambú" en el recopilatorio "Papito".

Ricky Martin prosigue con una intensa labor humanitaria iniciada hace años con su trabajo como embajador de UNICEF y con la fundación que lleva su nombre, cuya labor internacional ayuda a proteger a los niños de la prostitución infantil.

Y aunque los presentes proyectos musicales roban mucho tiempo al puertorriqueño, es esa fundación la que se encarga de "no detenerse en ningún momento en la labor que se ha iniciado", explica Martin, quien considera que "el hablar sobre ello en los medios también supone trabajar por esa causa".

"Cuando hace unos años me planteé abandonar la música para dedicarme por completo a proyectos filantrópicos comprendí que el poder de convocatoria que me ha dado la música es también imprescindible para desarrollar este proyecto", asegura el músico de fama internacional.

Sus viajes con varias ONG le han permitido conocer "realidades muy poco gratas" y no hablar de ello le convertiría "en un criminal más", opina, al tiempo que anuncia para un futuro un proyecto musical llamado "Alas" en el que involucraría al escritor Gabriel García Márquez y al propio Bosé.

"A día de hoy lo que practico es agradecimiento -afirma Ricky Martin-, porque todo lo que he soñado hasta ahora se ha cumplido y lo que venga a partir de ahora será la guinda del pastel".