Rubina Ali, la niña india que protagonizó Slumdog millionaire , la premiadísima película de Danny Boyle, sigue viviendo entre el polvo, la mugre y las aguas fecales de Garib Nagar, un poblado de chabolas al este de Bandra (Bombay). Solo que ahora sabe que existe un mundo luminoso, de camas limpias y piscinas de color turquesa, lleno de personas amables que te invitan a chocolatinas y te pasean en limusina por bulevares con palmeras. Le prometieron rescatarla del suburbio y se olvidaron de ella. Y casi perdió el equilibrio cuando una periodista del News of the World publicó que su padre la había querido vender por 300.000 euros.

Acosada y estafada, Rubina ha perdido la inocencia. Ahora, a cambio de un anticipo de 10.000 euros, ha accedido a contar su verdad en El sueño de Rubina (Planeta), escrito por Anne Berthod y Divya Dugar. Para promocionarlo, la han vuelto a catapultar a Occidente. Esta entrevista se celebró en París y no en Madrid.porque Rubina no está bien. Tose. Está muy cansada. Viaja en compañía de su tío Mohiuddin, el hermano mayor de su padre, al que consulta con los ojos cada respuesta. Solo tiene 10 años.

--¿Sabe por qué la eligió Danny Boyle entre tantos niños?

--No sé... Le gusté. Un día nos metieron a los niños de mi poblado en un autobús y nos llevaron a un estudio. Me hicieron correr. Otro día volvimos y dije una frase. Y otro tuve que comer como si estuviera muerta de hambre. Cada día subían menos niños al autobús... Nos eligieron a Azhar (Azharuddin Ismail), a Ayush (Mahesh Khedekar) y a mí.

--¿Y el rodaje fue divertido?

--Muy divertido. Hicimos lo mismo, pero de verdad.

--Además, ganó dinero.

--Unas 40.000 rupias (unos 600 euros). Sirvieron para arreglar el tobillo roto de aba (papá).

--O sea, que sigue viviendo en su casa de chapa...

--Sigo viviendo en Bandra, con mi familia, en la chabola.

--Sus amigos le preguntan qué hace una estrella como usted todavía ahí. ¿Qué les contesta?

--Les digo que me prometieron una casa y que no han cumplido su palabra. Algunos diarios han dicho que ya teníamos una, pero mi familia me ha explicado que a menudo no dicen la verdad.

-¿Qué piensa de los que prometen y no cumplen?

--Preferiría que no lo hicieran. ¿Qué obtienen mintiendo? Yo no lo entiendo. Las promesas se cumplen. Ya no voy a confiar más.

--Danny Boyle fue uno de los que le prometieron una.

--El fundó una asociación o algo así para asegurar el futuro de Azhar, el de Ayush y el mío. Creo que me paga la escuela... Y que le pidió a la asociación que nos buscara una casa.

(Mohiuddin, el tío de Rubina, explica que hace pocos días les han dicho que se pongan en contacto con un agente inmobiliario para que busque un barrio seguro y una escuela para la niña).

--En el libro dice que, tras conocer cómo viven en América, se siente un poco mal en el barrio. Ahora le disgustan la suciedad, las peleas, las ratas...

--(Mira a su tío) Yo estoy muy bien allí, con mi aba, mi nueva ami (la esposa de su padre) y mis dos hermanos.

--¿No le gustaría irse a un sitio más bonito?

--Me gustaría tener una casa como las que vi en América, pero en mi barrio.

--Quizá una casa tan bonita en medio de su barrio haría sentir mal a sus amigos.

--Pues, si no puede ser allí, si me tengo que ir, les visitaré todos los sábados. A Fana, a Asa, a Sohon, a Luxhar, a todos mis amigos...

--La echarán de menos. Me han dicho que es la líder de la pandilla.

--(Sonríe) Antes no era así. Pero, desde que saben que soy una artista, todos esperan que salga de casa para jugar conmigo.

--Saben que es una estrella.

--Sí. Lo saben porque la noche de la gala de los Oscar pusieron televisores en las calles y todos me vieron andar sobre la red carpet (alfombra roja, lo dice en inglés) y sobre el escenario. Ellos también han visto a todos esos periodistas dando vueltas por el suburbio...

--Cada vez le gustan menos los periodistas, ¿eh?

--¡Es que están ahí todo el tiempo, corriendo detrás de mí con las cámaras! ¡No me dejan descansar! Y me preguntan cosas que no entiendo. Yo todavía no sé pensar- Además, un periodista dijo en el diario que aba me quería vender a un jeque. Le pegaría... ¡Es una mentira!

(Una periodista del News of the World se hizo pasar por la esposa de un jeque, ofreció a Rafiq Qureshi 300.000 euros por adoptarla y publicó que había aceptado. Mohiuddin, el tío, habla para explicar que, cuando la pequeña se enteró, no había quien le parara el llanto, que fue difícil hacerle comprender que eso era una mentira. "Fue un montaje. Rubina no es una niña de la calle. Tiene una familia que la protege.Además, ¡solo a un idiota se le ocurriría vender a una niña oscarizada!", recalca. "Esa noticia nos produjo a todos un gran impacto, y a la niña, una pequeña depresión". Tras el escándalo, se publicó que la madre biológica de Rubina, Khursheed, que ya había aprovechado el tirón mediático de los Oscar para iniciar una batalla por su custodia, podía estar detrás de la maniobra. "No puedo confirmar algo así", dice Mohiuddin).

--¿Sabe ya cómo reconocer a los buenos de los malos?

--Es demasiado pronto para saberlo- Mi aba, su nueva esposa, mi tío y mi hermana mayor, Sana, me dicen lo que está bien y lo que no.

--¿No echa de menos a su mamá?

--Mi mamá es Munni, la mujer de aba. Mi mamá biológica me dejó, y ahora quería aprovecharse de que soy famosa. Vino a casa, pero aba le dijo que se fuera... A aba sí le quiero.

--Por supuesto.

--Aba es muy guay. Hago todo lo que me pide. Pero también me escucha, ¿eh? Cuando quiero algo, me lo da. Aunque tengo que estar muy alerta, porque, si hago tonterías, se enoja.

--¿Diría que es una niña o ya es mayor?

--En casa me tratan como a una niña, pero, fuera de casa, me miran como a un adulto.

--¿Usted cómo se siente?

--(Sonríe) Diría que soy pequeña.

--Sé que tiene estuche de maquillaje, y unos vestidos muy bonitos.

--Tengo el estuche, pero no me sé maquillar y mi hermana, que me pintó con henna para ir a Los Angeles, no quiere maquillarme más. Y los vestidos que compré en Los Angeles los tengo colgados de un clavo. Algunos se han manchado un poquito.

--Cuando sea una señorita, ¿se pondrá el burka?

--Sé que a aba le gustaría, porque es muy creyente, pero veo que las actrices de Bollywood no lo llevan...

--Si cierra los ojos, ¿qué imagen de América le aparece?

--Me veo caminando por la red carpet, con todos aquellos flases y toda aquella gente que nos aplaudía. Pensé: "Yo sí estoy aquí. Lo conseguí". Sentí mucho orgullo. Por nosotros tres (los tres niños indios). Y me gusta que la gente me reconozca por la calle. Y no solo en la India, sino en América... También aquí, en París, me piden autógrafos.

--¿Y qué cree que ha aprendido?

--Que para llegar a ser una actriz hay que trabajar mucho, mucho. Hay mucha gente que quiere tener una oportunidad. También he aprendido que es necesario que nos amemos, porque, si no, no tienes éxito.

--Una buena lección. ¿Y cómo se prepara para el futuro?

--Voy al colegio todos los días (en el libro dice que antes le aburría y que hacía campana a menudo para ir a jugar al lado de las vías del tren). También estoy estudiando inglés. ¡English is good!

--¿Usted quiere ser actriz de Bollywood o de Hollywood?

--¡De Hollywood!

--De momento, ha rodado el anuncio de un refresco con Nicole Kidman. Pero me parece que ella no le gustó mucho...--Me gusta más Angelina Jolie. Es más guapa y me dijo que le gustó mucho cómo actuaba yo.

-Espero que conquiste su sueño.