A falta de conocer la participación extranjera --se anunciará en agosto-- la 61 edición del Festival de Cine de San Sebastián, que tendrá lugar del 20 al 28 de septiembre, contará con una nutrida participación española tanto en la competición oficial como fuera de concurso. Entre las películas que optarán a la Concha de Oro figuran Vivir es fácil , dirigida por David Trueba y protagonizada por Javier Cámara y Natalia de Molina; Caníbal , de Manuel Martín Cuenca, y La herida del debutante Fernando Franco.

Competirán también por el máximo reconocimiento la coproducción hispano-canadiense Enemy , de Denis Villeneuve, y posiblemente una segunda coproducción, aún no confirmada, según explicó ayer José Luis Rebordinos, director del certamen, quién también anunció que esta edición habrá un segundo premio Donostia, además del ya desvelado que se concederá a la actriz Carmen Maura. Y fuera de concurso se podrá ver el nuevo trabajo de Alex de la Iglesia, Las brujas de Zugarramurdi .

MENOS DINERO Todo ello, suma un cartel, a juicio de Rebordinos, que demuestra que lo complicado no ha sido la selección, "hemos visto mucho cine español y muy bueno", sino conseguir encajar el programa después de perder 400.000 euros públicos y patrocinadores.

Como muestra de esa calidad, Rebordinos destaca las propuestas de la sección Zabaltegui, entre ellas los filmes Family Tour , de Liliana Torres Expósito, y el documental Serrat y Sabina, el símbolo y el cuate , de Francesc Relea.

Además, durante la cita se estrenará, en el Velódromo, Zipi y Zape y el club de la canica, de Oskar Santos.