Lleno de vitalidad, con un gran sentido del humor y siempre al lado de su mujer, Carolyn Richmond. Así se presentó ayer en el Palacio de Lorenzana de Trujillo, sede de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes el escritor granadino y académico de la Lengua, Francisco Ayala, que a sus cien años y casi dos meses afirmó que el único proyecto que tiene ya es "ver el día siguiente". A pesar de ello, aprovechó la oportunidad para animar a todos los aficionados a la literatura a comprar la antología De toda la vida , donde se recoge la evolución de este Premio Cervantes desde que publicó su primer libro en 1923 "hasta ayer mismo". Por este motivo "he puesto ese título".

Francisco Ayala, quien será hoy homenajeado por la Unión de Bibliófilos Extremeños (Ubex) en Almendralejo, afirmó bromeando que con tantos reconocimientos que está recibiendo por su centenario, "lo que temo es llegar al segundo centenario. No sé lo que va a pasar, estoy abrumado". Y es que, según el escritor, "dicen que la culpa de llegar a esta edad son los genes: pues no se quiénes son". Eso sí, reconoció que una de sus fórmulas para llegar a los 100 años y con tan buen humor es comer bien; "y en Trujillo se hace bien".

Tremendamente español

El escritor granadino, siempre apoyado del brazo de su mujer, estuvo recorriendo las distintas dependencias de la sede de la Academia de las Letras y las Artes con su director, José Miguel Santiago Castelo, y con la presidenta de la Ubex, Carmen Fernández Daza. Después de firmar en el libro de honor de la academia extremeña, Castelo afirmó que Ayala es "un ejemplo de ética, de buen hacer, de sentido del humor", y lo catalogó como "un escritor tremendamente español en todas las latitudes, un verdadero orgullo".

En este mismo tono se expresó Fernández Daza, afirmando que el invitado este año de la Ubex "todo lo que nos tiene que decir está recogido en su palabra conmovedora, rica, brillante, fecunda, y en esa palabra se deja traslucir ese personaje de fondo, que es sencillo, cercano".

Ante tanto elogio, el centenario escritor respondió a la presidenta de los bibliófilos: "Si hubiera sido más joven, le hubiera dicho un piropo"

Este granadino universal, quien remarcó que lo bueno de no recordar es que todo es nuevo, en relación a su anterior visita a Trujillo, hace 25 años, no quiso a entrar a valorar a los literatos extremeños porque primero "son escritores y luego extremeños".

El homenaje de la Ubex a Francisco Ayala se une a los muchos premios y reconocimientos que ha recibido a lo largo de su trayectoria literaria. Entre otros galardones, en 1972 recibió el Premio de la Crítica española por la novela El jardín de las delicias y en 1983 fue distinguido con el Premio Nacional de Literatura y elegido miembro de la Real Academia Española. En 1991 se le concedió el Premio Miguel de Cervantes, cuando tenía 92 años, por toda su trayectoria. Puede que haya transcurrido mucho tiempo de estos galardones, pero para él, es poco tiempo, ya que "25 años no es nada".

Día del Bibliófilo

La celebración que tendrá lugar en Almendralejo en honor de Francisco Ayala comenzará hoy a las once de la mañana con la apertura de un mercadillo de libros y con la recepción de autoridades. Seguidamente, se celebrará el acto institucional, donde el autor de Recuerdos y olvidos (sus memorias) y a quien se le hará entrega del libro homenaje.