El multimillonario y excéntrico Donald Trump no puede pasar ni una semana sin ser el centro de atención. Así volvió a suceder ayer, después de un combate de boxeo en el estadio americano de Ford Field, en Detroit, cuando le rasuró el pelo, al estilo Britney Spears, al también multimillonario Vince McMahon, presidente de la World Wrestlign Entertainment. Ambos apostaron que solo conservaría su cabellera el que consiguiese que su representado ganase. Bobby Lashley venció a Steve Austin y Trump disfrutó rapándole la cabeza a su rival (foto). Más de 80.000 espectadores, entre ellos la Miss Universo Zuleyka Rivera, vieron el espectáculo que acabó con Donald en el suelo mientras Austin, simulaba golpearlo.