Espectáculo total en la gala de entrega de la undécima edición de los premios San Pancracio celebrada anoche en el Gran Teatro de Cáceres. La cita por excelencia del cine en Extremadura consiguió llenar la bombonera cacereña en una velada que quedará marcada por la calidad y la satisfacción generalizada entre premiados y organizadores.

La iniciativa de la Asociación Cinéfila Re Bross tuvo esta vez un objetivo solidario. La recaudación íntegra de la gala irá a parar a la ONG extremeña Comité Ipiranga con el objetivo de construir un dispensario médico en la Amazonia brasileña. Las buenas intenciones se mezclaron con el derroche músical a cargo de la Beri Beribimba, la voz rota de Gene García y las coreografías de la compañía Jimmy Roca and Ballet.

El actor extremeño de piel morena que da nombre al grupo puso la salsa a una gala en la que impresionaron el cariño a Cáceres del director salmantino Basilio Martín Patino, galardonado con el premio honorífico por su trayectoria en el mundo del cine. "Estoy sorprendido por este maravilloso y extraño festejo", dijo. Su humildad y emoción contagiaron a un público ensimismado que pudo disfrutar también del desaliño elegante de Eduardo Noriega, premio al mejor actor por su participación en Las manos vacías , de Recha.

Pero todas las miradas se las llevó Leonor Watling. De negro y con ojos muy abiertos, la actriz de Mi vida sin mí dio la clave de la gala: "Es tan importante para el cine la revista Versión Original como el Oscar que recibió Pedro", en alusión a Almodóvar por Hable con ella , en la que tuvo un papel estelar. Las lágrimas las pusieron Millán Vázquez y Mónica Gallego, de la Agencia Audiosual Freak, premio a la mejor empresa extremeña. Los padres de Anabel Andújar, impulsores del certamen internacional en memoria de su hija, pusieron el recuerdo emocionado. Julián Rodríguez, director de EL PERIODICO EXTREMADURA, premio a la promoción del cine, agradeció la estrecha colaboración con la revista Versión Original.

La noche tuvo también tiempo para reconocer las trayectorias de la colaboradora de VO Rocío Tizón y de Mercedes Miranda, actriz revelación extremeña. La impresionante voz de la soprano Rosario Cruz dio paso al premio a la mejor banda sonora para Juan Bardem, hijo del cineasta español Juan Antonio Bardem, que disculpó su asistencia por encontrarse en Praga ultimando su nuevo trabajo.

Pero la velada deparaba la última sorpresa tras el "antojo" de Javier Remedios, la alma máter de la gala junto a los hermanos Rebollo, de ofrecer ópera con el tenor Alonso Torres. El regalo del vídeo grabado por David Trueba, San Pancracio al mejor director por Soldados de Salamina , demostró con creces que el festival de cine extremeño es una apuesta segura, fruto de la ilusión de la asociación cinéfila Re Bross. El abrazo de sus responsables en el cierre pusieron el broche a un señor espectáculo.