Pertenecen a colecciones privadas y algunas nunca han sido vistas por el público. Pero todas tienen el denominador común que impregna la obra de Joan Miró: la mujer, que el pintor equiparara al universo. Una de esas piezas excepcionales es Femme aux trois cheveux , formada por varios óleos pequeños sobre tela. Un lujo que se puede contemplar hasta el mes de junio en el Centro Cultural Bancaja en Valencia, que, junto a la Fundación Pilar y Joan Miró, ha organizado una exposición que reúne 154 piezas entre pinturas, esculturas y dibujos, así como objetos originales de los talleres de Sert y Son Boter, en Mallorca, donde el artista trabajó durante 30 años hasta su muerte en 1983.

La exposición Joan Miró. Evocación de la imagen femenina cuenta con otra joya inédita del artista, realizada en técnica mixta sobre papel. Se trata de una obra sin título, pero conocida como La bailarina de Montecarlo . "Miró pasó tres meses en Mónaco trabajando con la compañía de los Ballets Rusos, y parece ser que allí tuvo un amor pasajero con una bailarina de la obra que representaban", señala Enric Juncosa, comisario de la exposición y familiar directo de la esposa de Miró. La bella femme , un óleo sobre piel de oveja realizado en 1969, es otra sorprendente obra desconocida para el gran público.