El Museo del Prado va a mostrar al público una de las múltiples facetas de Velázquez: la de pintor de la historia. Más allá de los retratos y los paisajes que componen la mayoría de la obra del artista sevillano, la exposición Fábulas de Velázquez . Mitología e historia sagrada del Siglo de Oro da paso a desnudos, escenas bíblicas e imágenes mitológicas que ofrecen al espectador otra mirada sobre uno de los más grandes pintores españoles.

La idea de cargar sobre la nueva generación de jóvenes especialistas la responsabilidad de dar una nueva mirada a Velázquez fue de Gabriele Finaldi, director adjunto del Museo del Prado. En las obras religiosas y que aluden a la mitología "es donde tocamos la habilidad de Velázquez para narrar y para descubrir su fría sensibilidad", explicó Finaldi.

La exposición se abre con Cristo en casa de Marta y María y termina con Las Hilanderas , que se muestra en su tamaño original. Entre medias hay 52 obras, 24 de ellas de artistas diferentes y otras 12 prestadas por prestigiosas instituciones como la National Gallery de Londres, que recorren los 40 años más creativos del pintor, durante el reinado de Felipe IV.

SIN RETRATOS Pese a que Velázquez fue un pintor de corte, la muestra pone el acento en lo religioso, mitológico e histórico de su trabajo, y quedan aparcados los retratos y paisajes, que ocupan las habituales dependencias de la pinacoteca.

De esta manera, y dividida en siete secciones, se puede apreciar cómo Velázquez dialoga con otros contemporáneos o con quienes le precedieron y sucedieron. Así, en la sección titulada El desnudo se pueden contemplar uno de los cuadros más conocidos de Velázquez , La Venus del espejo, junto a Las tres Gracias , de Rubens. Y no muy lejos, se exhiben las obras de ambos con idéntico título Mercurio y Argos .

Los artistas que le acompañan, como Caravaggio, Tiziano, Zurbarán o El Greco, "son los que le sorprendieron, aprendieron de él y con los que se midió en su carrera", resumió Javier Portús, conservador del Prado y comisario de la muestra.

Desde hoy y hasta el próximo 24 de febrero estará abierta la exposición, que forma parte del programa de la nueva ampliación del Prado. Patrocinada por la Comunidad de Madrid y la fundación Axa Winterthur, que preside el aún duque de Lugo Jaime de Marichalar, fue inaugurada ayer por Reyes y el ministro de Cultura.