Un hombre convencido de sufrir una afección mortal que todos los análisis rebaten se pone en manos de un médico que teme decirle a su padre que sufre un cáncer terminal. Esta es la génesis de La enfermedad , obra con la que Alberto Barrera (Caracas, 1960) obtuvo el XXIV Premio Herralde de novela, dotado con 18.000 euros, al que se presentaron 172 originales. El venezolano superó en la final a Muerte de un murciano en La Habana , de Teresa Dovalpage (La Habana, 1966).

"Hemos sustituido la obsesión de la muerte por el terror hacia la enfermedad", apuntó el locuaz escritor, cuya obra parte del axioma de que vivir mata y se adentra en las relaciones paternofiliales. Al otro lado del teléfono, seguía sin digerir un galardón que confía que sirva para dar a conocer la literatura venezolana. Creador poliédrico, compagina los guiones de telenovelas con las columnas y ensayos políticos, pasando por la poesía y la novela, campo en el que debutó en También el corazón es un descuido (Plaza & Janés).

Barrera, que firmó junto con Boris Izaguirre el culebrón La pasión de Teresa , es conocido en el mundo catódico como el Doctor Muerte: "Cuando una telenovela está en problemas me llaman para cambiar la historia. Y claro, puede que haya algún incendio en el que mueran 17 personajes", relató con sorna.