"Ya nadie escribe cartas", constata el escritor, crítico y director de cine valenciano Vicente Molina Foix (Elche, 1949) que acaba de publicar El abrecartas (Anagrama), una novela que apuntala su narración en el género epistolar.

Quizá por ello, para levantar el acta de defunción del género y del siglo XX, el autor se ha valido de una correspondencia a muchas bandas que se inicia con las cartas de un amigo de infancia y admirador de García Lorca y acaba con un correo electrónico, la última mutación del género. Por el camino, a través de un elaborado entrecruzamiento de misivas y con algunas sorpresas de tintes casi policiacos se cuenta parte de la historia reciente y privada de España sembrada de ilustres famosos y desconocidos.