El príncipe italiano Víctor Manuel de Saboya, acusado de corrupción y explotación de la prostitución, considera su reciente paso por la cárcel como un "nubarrón". El hijo del último rey de Italia, de 69 años, no guarda malos recuerdos de la prisión. "Nunca he dormido tan bien. Me daban medicamentos y me pedían autógrafos y fotos", cuenta. El aristócrata se halla en arresto domiciliario desde el pasado 18 de diciembre.
