Su trabajo es con las formas, sean retratos, multitudes o edificios. Pintados a partir de fotografías, presenta sus últimas obras en la galería María Llanos de Cáceres

Las masas de gentes anónimas que llenaban los cuadros de Virginia Frieyro (Madrid, 1973) han dado paso en estos tres últimos años a edificios anónimos en sus últimas obras. Pero el juego es el mismo. "Multitudes de personas o fachadas de Madrid vistas a través de árboles, me sirven para seguir investigando con las formas y los vacíos, con la doble imagen, con lo figurado y lo abstracto", afirma. Vuelve a la galería María Llanos, donde expone (es su sexta muestra individual desde el 2001) hasta mediados de julio.

--¿Cómo ha evolucionado?

--Comencé pintando cuadros blancos sobre fondo blanco, hacía estudios cromáticos. Poco a poco me fui acercando a la figuración hasta hacer una exposición sobre retratos, y ahora vuelvo a la abstracción, aunque lo hago desde la fotografía, desde lo hiperrealista. Son imágenes en las que leemos una fotografía que por otro lado se deshace y se convierte en lo pictórico .

--La engloban bajo la etiqueta de nuevos figurativos, ¿qué le conduce a la figuración?

--Las etiquetas vienen después. El artista trabaja, y otros etiquetan el resultado. No es ninguna misión para el artista ser figurativo o abstracto.

--¿Y la crítica le muestra algún camino? ¿Le confirma lo que sabe?

--Está bien leer la crítica, es una visión distinta... A veces se verbaliza lo que uno no sabe decir con palabras, son lenguajes totalmente diferentes.

--Mantiene desde el 2006 una relación artística con María Llanos. ¿Qué le ha permitido esa vinculación?

--Con María tengo muy buena relación, he realizado dos exposiciones individuales con ella y asistido a varias ferias. En las ferias ha dado a conocer mi trabajo a un público al que yo no tengo acceso, coleccionistas, galeristas, instituciones- Ese es su trabajo, lo hace bien. Javier Panera, director del museo contemporáneo de Salamanca, DA2, compró una obra mía a María Llanos para el museo.

--¿Piensa los cuadros? ¿Los pinta directamente? ¿Los rompe? ¿Los salva?

--Por supuesto que los pienso, hay mucho trabajo anterior al lienzo. No los rompo, pero hay muchos que no salen del estudio.

--¿Depende de algún modo de sus compradores?

--No dependo de mis compradores, estaría frustrada si así fuera. Un artista tiene que ser libre para trabajar, no puede serlo de otra manera.

--¿Pintará por ordenador?

--Claro, ¿por qué no?

--Las grandes colas de exposiciones siguen siendo de pintores. ¿Usted forma parte de esas colas? ¿Qué ve de nuevo en Matisse, ahora en el Thyssen, o en Sorolla, en el Prado?

--No hago cola para ver una exposición, no tengo tiempo. Así que de momento no he podido ver ni a Matisse ni a Sorolla, pero sí que he visto las fotografías pintadas de Gerhard Richter que forman parte de la programación de PhotoEspaña de este año. Richter es uno de mis referentes y esta exposición es de lo mejor que he visto en Madrid desde hace mucho tiempo.