Cáceres siempre aspiró a ser sede de la Copa del Rey. Cuando el equipo de la ciudad coqueteaba con la clase noble de la Liga ACB, lo solicitó en numerosas ocasiones. Sin embargo, la dirección de la Asociación de Clubes nunca lo consideró oportuno, poniendo múltiples excusas para ello.

Ese sueño nunca cumplido chocó durante varios años con la falta de una instalación digna para acoger toda la infraestructura copera. El pabellón V Centenario cumplía los requisitos para los encuentros ligueros, pero difícilmente hubiese podido absorber a la cantidad de aficionados y medios foráneos que se dan cita en un evento así. Sin embargo, y es un argumento que pueden utilizar los que creen en una ´mano negra´, a la ACB no le importó conceder a Cáceres el All Star de 1997, lo que requería similares condiciones tanto en el pabellón como en la ciudad.

Sin embargo, organizar la Copa siempre tuvo más ´novias´ que el All Star, que dejó de celebrarse por falta de pretendientes. Ese es un problema que nunca ha tenido el torneo copero, que además contaba con el patrocinio de El Corte Inglés, una firma que no tenía ningún establecimiento en Cáceres. Fue otra justificación para que el torneo no llegase. El único precedente en Extremadura lo tiene Badajoz, que inauguró Entrepuentes en 1981 con una mítica final Madrid-Barcelona cuando el nuevo formato no se había implantado.

La inauguración del multiusos Ciudad de Cáceres a finales de 1999 no supuso un avance en las históricas aspiraciones: el club local ya era entonces poco menos que un ´apestado´ en el ´mundillo´ ACB por sus problemas económicos. J. ORTIZ