La plantilla del Mérida disfrutó ayer de un entrenamiento atípico. Al final de la sesión, todos los niños que estuvieron presenciando el trabajo, casi un centenar, saltaron al terreno de juego para pasar un rato con sus ídolos. Además, fueron obsequiados con dos entradas cada uno para el partido de mañana frente al Olivenza (12.00 horas). Para este encuentro el club ha decidido que cada abonado (cuyo acceso es gratuito) pueda adquirir dos entradas al precio de una. La intención es que el Romano presente un gran aspecto.

En lo meramente deportivo, Migue Montes continúa recuperándose de su lesión de rodilla. Sigue sin entrenar y mañana no jugará. El que sí entrena ya con normalidad es Adri Montesinos, que sufrió un esguince la semana pasada que le impidió estar en el último encuentro, tal y como explicó su entrenador, Santi Amaro, tras el choque frente al Coria.