El brasileño Adriano Correia se marchó ayer tarde de la concentración de pretemporada que desarrolla el Sevilla FC en Rota (Cádiz), ya que hoy tiene previsto pasar el reconocimiento médico previo a su fichaje por el Barcelona, y ha reconocido que se le "han caído las lágrimas".

"Creo que la cosa ya está hecha. Sólo tengo que decir muchas gracias a Del Nido --presidente del Sevilla-- y a Monchi --director deportivo-- porque han facilitado las cosas, que han salido bien para mí y para el Sevilla", comentó el jugador en unas declaraciones que incluye la web oficial del club hispalense.

Para Adriano, los cinco años y medio que ha "pasado en el Sevilla han sido inolvidables" y dice carecer de "palabras para agradecer el trato y el cariño de la afición". El jugador espera "triunfar en esta nueva etapa".