Para no herir susceptibilidades en otras hinchadas extremeñas, tal como proclama el anuncio de una conocida marca de cervezas, recurrimos al adverbio ´posiblemente´ para titular este reportaje.
Y es que, en la actualidad, la afición del Mérida, posiblemente, pasa por ser la mejor de Extremadura. Y los números lo corroboran. Pese a jugar en Tercera, el club romano tuvo esta temporada 1.200 abonados.
Durante la fase regular, el Mérida ha contado con una media cercana al millar de espectadores en los diecinueve partidos disputados en su feudo (960 para ser más exactos). La mejor entrada se registró en el derbi ante el Imperio (2500 espectadores) y la más discreta ante el Villafranca (600), aunque, eso sí, en un partido disputado entre semana en una gélida noche del mes de enero.
Como visitante, también fue el equipo más visto en el grupo extremeño de Tercera con una media de 495 espectadores.
Un chollo para la Tercera
No sorprende, por tanto, que hasta siete clubs aprovecharan la visita del Mérida para declarar el partido como medio día del club o bien simplemente para incrementar el precio de las entradas. Este fue el caso en las visitas al Imperio, que abrió la veda, Santa Amalia, Amanecer, La Estrella, Miajadas, Extremadura B y Villafranca.
En los desplazamientos, el Mérida fue seguido por una cifra media nunca inferior al centenar y medio de fieles. Una circunstancia que también se repitió en la primera eliminatoria de la fase de ascenso en terreno de la Balona, pese a los 400 kilómetros que separan Mérida de La Línea de la Concepción. Incluso en la localidad almeriense de Roquetas de Mar, a más de 600 kilómetros de distancia, hubo un centenar de seguidores romanos.
También tiene su mérito que un equipo de Tercera cuente con cuatro peñas: Legiones Sur, Luis Miguel Olivar, Romanos y Deportes 2002. Todas ellas se ubican en preferencia.
La más antigua, y a la vez la más numerosa, es Legiones Sur, cuyo número de miembros ronda el medio centenar.
Le sigue en número de miembros la peña Luis Miguel Olivar con algo más de una veintena de socios, aunque la cifra se aproxima al medio centenar cuando se unen las parejas de cada uno de ellos. La peña que lleva el nombre del jugador madrileño es la más joven, pues se creó el pasado mes de febrero al poco tiempo de retornar Olivar procedente del Extremadura.
Las peñas Romanos y Deportes 2002 tienen varios años de historia, aunque una y otra son las más reducidas en cuanto al número de integrantes.
La afición del Mérida disfruta con el ascenso de su equipo y, tras unos años difíciles, tiene motivos más que suficientes como para volver a soñar.
