El catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota) dejó sentenciado ayer el rally Dakar en coches al adjudicarse la penúltima etapa de la carrera que se disputa íntegramente en Perú, en la que estiró aún más la diferencia sobre sus perseguidores. Al-Attiyah se llevó la etapa gracias a los problemas sufridos por el francés Sébastien Loeb (Peugeot), que había marcado los mejores parciales hasta la parte final, donde su coche se quedó detenido hasta en dos ocasiones, y al abandono del también francés Stéphane Peterhansel (Mini).

De esos problemas del nueve veces campeón del mundo de rallys también se vio beneficiado el catalán Nani Roma (Mini), que conserva la segunda posición, aunque a 51 minutos de Al-Attiyah. Loeb, que es el piloto que más etapas ha ganado en este Dakar (4), terminó la etapa a una hora y quince minutos de Al-Attiyah, por lo que en la general está a más de dos horas del catarí.

El francés Michael Metge (Sherco) ganó en motos, donde el australiano Toby Price (KTM) y el chileno Pablo Quintanilla (Husqvarna) terminaron a la par, por lo que se jugarán el título hoy, en la última etapa. Price, que ya fue campeón del Dakar 2016, afrontará la última etapa del rally como líder de la carrera, con 1 minuto y 2 segundos de ventaja sobre Quintanilla, que es segundo.