Todo hace indicar que el Alter Enersun Al-Qázeres Extremadura tendrá un problema menos en su encuentro de este miércoles ante el Gernika Bizkaia: los pronósticos sobre la participación de Mariella Fasoula son halagüeños y, como mínimo, hará con sus compañeras en largo viaje que emprenderán hacia el norte.

Fasoula se lastimó la espalda en un entrenamiento al principio de la pasada semana y, con fuertes dolores, no pudo jugar frente al IDK Euskotren el viernes, pese a lo cual su equipo logró la victoria.

Después de aquello, el pesimismo alrededor de su estado físico se ha ido volatilizando y ha ido entrenando con mayor intensidad tanto domingo como lunes, lo que probablemente animará a su entrenador, Jacinto Carbajal, a no reservarla para encuentros con mayor posibilidad de victoria, como el del sábado ante el Gran Canaria. «Sus sensaciones han sido buenas. Irá cogiéndolas cada vez mejores y está para entrenar y para ayudar. Podíamos haber tenido la tentación de ‘guardarla’ para siguientes partidos y quizás lo hubiésemos hecho si nos hubiese generado dudas, pero la evolución es positiva. Apriori, vamos a contar con ella», comentó el técnico, que reconoció abiertamente que antes de empezar la liga hubiese firmado ir con un balance de 2-3 a la altura de la quinta jornada.