Ameryst Alston. Así es como se llama la joven nortemericana en la que el Al-Qazeres deposita buena parte de sus opciones de permanencia en su segunda aventura en la Liga Femenina de baloncesto. "Es una enorme jugadora", aventura el club extremeño. Tiene que serlo: será titular y absorberá la mayor parte de minutos en la posición de escolta (mide 1,79).

Es una apuesta con el riesgo de que no se adapte. Tiene 22 años y será su primera experiencia en el baloncesto profesional después de terminar su periplo universitario en Ohio State. Pero buenas referencias y prestigio no le faltan: desde los números (18,3 puntos por partido en la última tmeporada en un equipo puntero) al hecho de haber sido escogida con el número 28 del draft de la WNBA por las New York Liberty.

"Debe ser nuestro referente ofensivo. Sus números son espectaculares en una muy buena universidad. Esperemos que nos aporte anotación, aunque tendrá la dificultad que es su primera experiencia en Europa y en una liga muy exigente como la española", comenta Jacinto Carbajal, el que será su nuevo entrenador, que agrega: "con ella y Pamela Rosanio esperamos tener una línea exterior muy potente".

Al Al-Qazeres todavía le faltan varias piezas para completar su rompecabezas, pero tras este fichaje hay una conclusión clara: tendrá que fichar nacionales o 'cotonous' para completar su juego interior, ya que con Alston y Julie Forster ya ha agotado sus dos plazas de extracomunitarias. La continuidad de Silvia Romero se da por hecha.