El líder ante el penúltimo del grupo A de la Liga Femenina 2. El CB Al-Qazeres ante el Aragón Azulejos Moncayo de Zaragoza. En teoría, debería resultar un compromiso sencillo desde las 18.00 horas en el pabellón Serrano Macayo, aunque los llamamientos a la concentración en las extremeñas han sido constantes en los últimos 15 días sin competición. No vale la relajación, se piensa una vez más para un ejercicio en el que todo está saliendo, globalmente, con una nota excelente.

Y es que el dubitativo mes de marzo del equipo de Jacinto Carbajal --se han producido en este margen dos de las tres derrotas acumuladas hasta ahora, pero "muy seguidas"-- no permite relajación alguna. El propio técnico ya lo advirtió ayer en la previa. "En este parón hemos acumulado bastante carga de trabajo", reflejó Carbajal. Hay que volver a ser el equipo creíble que ha sido en estos meses.

NECESITADOS "Tras un mes malo y sensaciones no tan buenas", sugiere, se impone un duelo para la credibilidad ante un equipo, el aragónes, "de zona baja, pero necesitado", recuerda el técnico, quien enfatiza en el espíritu ofensivo del rival y la incomodidad que supone su estrategia.

El horizonte sigue puesto en la fase de ascenso a Liga Femenina, que puede acoger Cáceres, pero con la competencia real de Vitoria, cuando menos. En los próximos días se decidirá qué ocurre. Hasta que ello ocurra, se impone hacer un buen partido en aras a la confianza del grupo. "Confianza" es la palabra que utiliza el entrenador.

Llega la jornada vigesimocuarta y el Al-Qazeres trata de asegurar el liderato. Restan tres encuentros antes de la fase definitiva y solamente está decidido que las extremeñas pelearán por recuperar la élite. Hasta entonces, resta remar fuerte, pero con el viento a favor.