Javier Pérez Mateos no nació en Albalá, pero lleva el pueblo de su padre en el corazón. «Estoy enamorado de esa tierra», dice sin rubor alguno este futbolista de 24 años que hoy tendrá la oportunidad de enfrentarse al Barcelona en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey defendiendo la camiseta del Ibiza. Es una semana de «muchas emociones», confiesa él, que desde que tiene memoria pasa los veranos y las navidades en esta localidad de la provincia de Cáceres. De su última visita no ha pasado ni un mes. «Es un sitio que me encanta, disfruto mucho», reitera.

En la última semana la afición por el Ibiza ha aumentado en Albalá, sobre todo entre los madridistas. «He recibido muchos mensajes de familiares y amigos diciéndome que a ver si eliminamos al Barça», cuenta en todo de humor Javi Pérez, que juega de mediocentro. «Me gustaría que alguno hubiese podido venir, pero esto está muy lejos». Hace varias temporadas, cuando jugaba en el Guadalajara (equipo en el que se formó), se enfrentó al Cacereño en el Príncipe Felipe y aquel día sí acudió su familia, rememora con emoción.

Javi Pérez (24 años) llegó a Ibizi el pasado verano procedente del Valladolid B. Antes había estado en el Almería B, a donde llegó desde el Guadalajara. En el equipo pitiuso se ha convertido en uno de los fijos. Solo se ha perdido dos partidos.

Ahora espera poder enfrentarse al Barça de los megacrack, ser uno de los elegidos por el técnico. «Todos queremos jugar, aunque solo podrán hacerlo catorce. Lo que sí tenemos que hacer todos es disfrutarlo». Él tiene claro que va a hacerlo. Del mismo modo que también sabe que lo importante es la liga, con el Ibiza peleando por el ascenso. Y de eso no se han despistado: «Desde que nos tocó el Barça hemos sumado seis puntos en dos partidos», dice a modo de aviso.