Alberto García ha sido hallado culpable de "ingestión exógena" de EPO, tras los resultados de los análisis y de las pruebas practicadas, y el Comité de Competición de la Federación Española de Atletismo le ha impuesto, por ello, una sanción de dos años de suspensión.

García, actual campeón de Europa de 3.000 y 5.000 metros y mejor atleta español del año 2002, no podrá volver a competir hasta el 9 de junio de 2005, de acuerdo con la resolución oficial del Comité, y el atleta se perderá, por tanto, los Juegos Olímpicos de Atenas.

El presidente del Comité de Competición, José María Mir, confirmó a Efe que, una vez agotados todos los trámites y practicados todos los análisis y pruebas solicitadas por el atleta español, "existe la convicción de que ha habido ingestión exógena de EPO, por lo que se le ha aplicado la sanción que contemplan tanto la Federación Española como la IAAF".