El delantero del Betis Alex Alegría manifestó ayer que el año que ha estado cedido en el Numancia le ha servido para coger confianza para demostrar que es futbolista de Primera y que, después de "lo sufrido y luchado", es un "gran premio" pertenecer a la primera plantilla verdiblanca. El placentino, ex del Cacereño, de 23 años, ha sido repescado para formar parte del primer equipo la próxima temporada a las órdenes del uruguayo Gustavo Poyet y, en declaraciones a la radio del club, dijo que llega con la aspiración de jugar el máximo y crecer como jugador en "la mejor categoría que hay en el mundo". Se mostró agradecido a su periplo soriano por la acogida de la ciudad y la experiencia adquirida en Segunda, aunque matizó que no hay tantas diferencias con la Segunda B a la hora de aguantar el balón, jugar de espaldas o encarar, pero sí en la competitividad, porque "vas al campo del último clasificado y es díficil ganar".