El español Fernando Alonso (Renault), recientemente proclamado campeón del mundo de Fórmula Uno, ha señalado que en los últimos Grandes Premios que quedan por disputar esta temporada podrá "ser más agresivo".

"En Suzuka puede ser diferente. Ahora puedo ser más agresivo en la forma de utilizar la ingeniería, los neumáticos, todas las partes del coche", afirmó el piloto a la página web de Renault.

El piloto asturiano ha señalado que ha crecido junto con su equipo, "me siento muy orgulloso de haber ganado con Renault. Me uní a ellos como piloto de pruebas en 2002, cuando luchábamos por el quinto lugar en el campeonato de constructores. Ahora todos somos campeones, cada uno de nosotros".

Alonso ha querido dar las gracias a todas las personas que se dieron cita en el centro de Oviedo para celebrar su victoria. "He tenido que renunciar a algunas cosas en mi vida, hacer sacrificios y trabajar muy duro. La gente y esta celebración es una compensación. Conduzco de manera que la gente puede disfrutar viendo las carreras y esto aún no ha terminado".

FELICIDAD Por su parte, el director técnico de chasis del equipo Renault, Bob Bell, se declaró "emocionado" por el título mundial del español Fernando Alonso y destacó que son "el primer equipo que interrumpe el reinado de Schumacher, y en solo cuatro años trabajando juntos".

"El título significa mucho", añadió, "porque el equipo al completo ha trabajado muy duro para conseguir este resultado. Es una gran recompensa. Estoy orgulloso de todos los que trabajamos en Enstone, que han dado el cien por ciento durante meses sin descanso".

Con respecto al campeonato de constructores, encabezado ahora por McLaren con dos puntos de ventaja sobre Renault, Bob Bell aseguró que ganar también este título "no es un objetivo imposible, faltan todavía dos pruebas y estamos dispuestos a recuperar el liderato", declaró ayer el director técnico de chasis del equipo Renault.