Fernando Alonso (Ferrari), séptimo en el Gran Premio de Mónaco ganado con enorme autoridad por el alemán Nico Rosberg (Mercedes), se mantiene tercero en el Mundial de pilotos, con 78 puntos, a ocho puntos de Kimi Raikkonen (Lotus) y a 29 del lider Sebastian Vettel (Red Bull). El bicampeón asturiano no puso excusas a su discreta e inesperada séptima plaza por las calles de Mónaco y simplemente reconoció que "no teníamos ritmo para estar con los de delante".

El lider de Ferrari aseguró que "ya desde el inicio, cuando vimos que no eramos capaces de hacer buenos parciales en ninguno de los sectores de este retorcido trazado, supimos que ibamos a vivir una carrera complicada. Además, para mayor desgracia nuestra, el primer coche de seguridad apareció en la pista justo cuando yo había hecho el cambio de ruedas, estropeando cualquier estrategia que tuviésemos tras esa buena decisión". Ni que decir tiene que Alonso criticó el comportamiento "demasiado agresivo a mi entender" del mexicano Sergio Pérez a lo largo de todo el gran premio.

"Es normal, lo mismo me ocurría a mi en los años 2008 y 2009, cuando tú estas peleando siempre por la décima plaza, como les sucede ahora a los McLaren de Jenson Button y Sergio (Pérez), intentas aprovechar carreras como esta de Mónaco para lanzarte a tumba abierta. Y, claro, provocas más de un lio". Alonso recordó que tanto él como Kimi Raikkonen (Lotus), el otro gran perjudicado por la excesiva fogosidad de Pérez (McLaren), están peleando por el título. "Cuando tú peleas por el título tienes que pilotar de una manera más cauta, más inteligente, más sensata si simplemente vas a por los puntos o el podio. Yo, por ejemplo, hoy, en la chicane si no me aparto, si no me la salto con riesgo, como así ha ocurrido de que me penalicen un puesto, me llevo puesto a Pérez, que me ha pasado de forma increible. Y, luego, en la curva cerradísima de Loew, si no le dejo sitio a Adrian Sutil, acabó ahí mi carrera y me quedo sin puntos. Pero si quieres seguir con opciones al título no tienes más remedio que aguantar esa acometidas y ceder".

Alonso explicó que, precisamente, tuvo problemas en las últimas diez vueltas por culpa de la fogosidad de Pérez pues "cuando chocó con Kimi (Raikkonen), restos de fibra de su alerón delantero quedaron enganchados al suelo de mi Ferrari y tuve que hacer la última parte del gran premio así. Una lástima pero, insisto, el problema de esta séptima plaza es que no teníamos ritmo. No hay más".